miércoles, 29 de septiembre de 2010

La Domesticación y el Sueño del Planeta...

La Domesticación y el Sueño del PlanetaSiempre me gustó leer. Sin embargo, últimamente con el tiempo que parece reducirse tanto, y gracias a la tecnología y la maravilla de las comunicaciones, agradezco infinitamente la existencia de los “audio-libros”. La nueva forma de “beberse” los libros… ya no por los ojos, ¡sino con el oído!

Ello me ha permitido poder dibujar, cocinar, manejar o realizar alguna otra tarea cotidiana… ¡mientras enriquezco mente y espíritu escuchando interesantes y fascinantes temas!

Queriendo compartir contigo esta mi pasión por aprovechar cualquier momento para aprender lo más posible, inicio esta sección. Espero te resulte de interés y se convierta en una de tus favoritas en “El Viraje Hacia La Luz…”

Comenzamos aquí con un tema interesantísimo de Don Miguel Ruiz: “La Domesticación y el Sueño del Planeta”: 27.02’ que se te irán como un sueño, por lo apasionante del tema.

Escucharás cómo Don Miguel Ruiz, con su profunda sabiduría tolteca, nos comenta:

“Lo que ves y escuchas ahora mismo no es más que un sueño. En este mismo momento estás soñando.

Sueñas con el cerebro despierto.

Soñar es la función principal de la mente, y la mente sueña veinticuatro horas al día. Sueña cuando el cerebro está despierto y también cuando está dormido. La diferencia estriba en que, cuando el cerebro está despierto, hay un marco material que nos hace percibir las cosas de una forma lineal. Cuando dormimos no tenemos ese marco, y el sueño tiende a cambiar constantemente.

Los seres humanos soñamos todo el tiempo. Antes de que naciésemos, aquellos que nos precedieron crearon un enorme sueño externo que llamaremos el sueño de la sociedad o el sueño del planeta.

El sueño del planeta es el sueño colectivo hecho de miles de millones de sueños más pequeños, de sueños personales que, unidos, crean un sueño de una familia, un sueño de una comunidad, un sueño de una ciudad, un sueño de un país, y finalmente, un sueño de toda la humanidad.

El sueño del planeta incluye todas las reglas de la sociedad, sus creencias, sus leyes, sus religiones, sus diferentes culturas y maneras de ser, sus gobiernos, sus escuelas, sus acontecimientos sociales y sus celebraciones.

Nacemos con la capacidad de aprender a soñar, y los seres humanos que nos preceden nos enseñan a soñar de la forma en que lo hace la sociedad. El sueño externo tiene tantas reglas que, cuando nace un niño, captamos su atención para introducir estas reglas en su mente. El sueño externo utiliza a mamá y papá, la escuela y la religión para enseñarnos a soñar…”

El lenguaje es el código que utilizamos los seres humanos para comprendernos y comunicarnos.
Cada letra, cada palabra de cada lengua, es un acuerdo. Llamamos a esto una página de un libro; la palabra página es un acuerdo que comprendemos. Una vez entendemos el código, nuestra atención queda atrapada y la energía se transfiere de una persona a otra.

Tú no escogiste tu lengua, ni tu religión ni tus valores morales: ya estaban ahí antes de que nacieras. Nunca tuvimos la oportunidad de elegir qué creer y qué no creer. Nunca escogimos ni el más insignificante de estos acuerdos. Ni siquiera elegimos nuestro propio nombre.

De niños no tuvimos la oportunidad de escoger nuestras creencias, pero estuvimos de acuerdo con la información que otros seres humanos nos transmitieron del sueño del planeta. La única forma de almacenar información es por acuerdo. El sueño externo capta nuestra atención, pero si no estamos de acuerdo, no almacenaremos esa información. Tan pronto como estamos de acuerdo con algo, nos lo creemos, y a eso lo llamamos «fe». Tener fe es creer incondicionalmente…”

En fin, no se hable más del asunto: ¡presta oídos a este audiolibro de sabiduría tolteca!
Los Cuatro Acuerdos.
Dr. Miguel Ruiz

Sólo haz “clic” en el siguiente link:

No hay comentarios: