¿Tu despertar espiritual te ha costado unos cuántos amigos? ¿Has
notado un cambio en tus relaciones con otras personas últimamente? ¿Te resulta
a veces difícil o incómodo hablar con otras personas acerca de temas
espirituales? ¿Te sientes, a veces, solo en sus creencias? ¿Has perdido el
contacto con amigos de mucho tiempo últimamente?... ¡Debes saber que no estás
solo!
Demasiadas veces, veo un montón de gente que habla por hablar, pero tienen
miedo de caminar la caminata, debido al miedo de ser ridiculizados por sus pensamientos
y mensajes (pensamiento de grupo). He perdido algunos amigos de toda la vida,
debido a esto, pero he hecho muchos, muchos otros nuevos.
Una vez es soltado el ego, ya no te preocupas acerca de la conformidad y la
presión del grupo. El pensamiento grupal es un fenómeno psicológico que
estructura varios sistemas de creencias de un grupo de personas, y desalienta
la creatividad individual y el pensamiento independiente.
Incluso dentro de un grupo de individuos que están espiritualmente despiertos,
encontrarás “pensamientos de grupo”. Si nos fijamos en la historia registrada
de la humanidad, encontrarás que esta historia no es más que la interpretación
de alguien, de un hito o un proceso evolutivo, apoyado por testimonio ocular,
datos científicos, un vídeo o la fe.
La verdad real puede ser ocultada o distorsionada por muchas razones, pero
sobre todo para el control y el poder. Busca más allá de los orígenes de la
humanidad y encontrarás una gran cantidad de mitos de la creación de todas las
culturas, con variadas fechas de nuestra existencia.
¿Quién tiene razón? ¿Puedes hablar con tus amigos sobre el Universo? ¿Saben
ellos lo que es una “puerta estelar” o un “chakra”? ¿Están dispuestos a hablar
de la Ascensión
o iluminación espiritual?
Cuando hablas con la gente sobre el mito de la creación, tienden a permanecer
en el “interior de la caja” con un sistema de creencias que apoya la historia
religiosa de la creación, que data a la humanidad a 4000 A.C.
Si haces preguntas sobre nuestros verdaderos orígenes, tiendes a separar a las
personas y las relaciones entre los que piensan "fuera de la caja"
versus a los que piensan "dentro de la caja". Cuando estos temas
surgen en las relaciones, a menudo crean disensión.
Es difícil para cualquier persona admitir que ha sido engañada por tanto tiempo
y aún más difícil admitir que estaba posiblemente equivocada en sus
suposiciones. Este es un excelente ejemplo de cómo nuestros sistemas educativos
nos mantienen encerrados en el interior de la caja, sin cuestionar nada de lo
que "se nos ha enseñado".
Los encerrados en la caja, los que permanecen dentro de ese sistema de
creencias, tienen miedo de lo que otros puedan pensar si se aventuran a salir "fuera de la caja"… De ahí que siguen siendo complacientes y serviles, conformándose
a lo que la sociedad dicte, en lugar de confiar en su propio discernimiento y
juicio.
La gente podría vivir toda su vida fingiendo ser lo que la sociedad espera que
sean y ni siquiera lo saben! Desde el punto de vista del ego, nuestros pensamientos
son básicamente motivados por lo que hemos aprendido de nuestra familia,
amigos, sistemas educativos y creencias religiosas, pero, ¿qué es lo que se nos
ha enseñado realmente?
¿Qué podemos decir acerca de cualquier criterio que no haya sido inculcado a
nosotros por otra persona? Como se desprende de regresiones a vidas pasadas,
nuestras vidas pasadas y la historia del alma permanecen latentes en nuestro
ADN celular, y pueden recuperarse a través de nuestra mente subconsciente, a
través de la hipnoterapia.
Dentro de tu ADN celular, en realidad recuerdas haber estado de vuelta con la Fuente junto con todas las
cosas que querías lograr durante esta encarnación, así como todos los desafíos
que querías vencer, y toda la gente que te llevaría a donde estás ahora.
Esto incluye a las personas que han venido y se han ido de nuestras vidas. A
veces, proyectamos ser alguien que esperamos que otros vean en nosotros. En
psicología, esto se conoce como "el yo sombra", donde proyectamos una
identidad que se ajusta a la forma en que otras personas quisieran percibirnos,
versus a ser fieles a lo que somos en realidad.

Algunas personas pueden encontrar que nunca supieron quiénes
eran porque vivieron sus vidas a través de las expectativas de cómo otros les
percibían a ellos.
Aquellos que han comenzado sus viajes espirituales también pueden enfrentarse a
estos problemas, que inicialmente crean la “disonancia cognitiva”. La
disonancia cognitiva se produce cuando se obtiene una sensación de incomodidad
causada por sostener ideas conflictivas simultáneamente.
Este es el período de transición por el que muchos de nosotros hemos tenido que
pasar, que han cambiado nuestras creencias, sin embargo, no estamos seguros de
comunicar estas ideas con nuestros amigos y familiares, por temor o
rechazo.
A medida que continúan nuestros viajes espirituales, nos sentimos más cómodos
dentro de nuestras propias creencias y menos preocupados acerca de cómo
nuestros amigos y familiares ven el despertar. Esto es cuando el ego se separa
del yo y el miedo se disuelve con el amor. En este punto, empezamos a hablar
con conocidos así como con amigos y familiares, sobre temas espirituales y
metafísicos, dándole menos importancia a lo que ellos puedan pensar de nosotros
o cómo podemos ser percibidos por otros.
Con el tiempo, la espiritualidad será el marco predominante de la mente y lo
más probable es que aquellos que se han alejado de nosotros serán los primeros
en la cola en pedir ayuda para adaptarse al nuevo paradigma.
Recuerda esto: ¡No estás solo!
Aquellos que verdaderamente te aman se mantendrán a tu lado sin importar
qué. Aquellas personas que ya no forman parte de nuestras vidas ya han jugado su
papel ayudándonos a descubrir quiénes somos en realidad. A veces, se necesita
la polaridad para poder ser capaces de diferenciar quiénes somos y hacia dónde
vamos.
Aquí es donde los no-despiertos ayudan enormemente, estableciendo ese contraste
que nos permite ver las diferencias.
Visualiza a cada persona despierta en todo el planeta sosteniendo una vela.
Mientras la vela individual puede no parecer como un montón de luz, realmente
contribuye en gran medida a que el mundo se llene de luz y nos mantenga
conectados, sin importar lo lejos que estemos. Aunque puede ser doloroso perder
algunos queridos amigos, piensa qué es lo que éstos han traído a tu vida y por
qué.
Lo más probable es que darás término a unas cuantas viejas relaciones con
personas que estuvieron, en un tiempo, muy cerca de ti, sólo para crear nuevas
relaciones con personas de ideas afines.
Perdónate a ti mismo, así como a tus amigos, si te sientes mal por esto. La gente viene a tu vida por una razón, una temporada o toda una vida. Cuando
averigües cuál es el motivo de cada presencia en tu vida, sabrás qué hacer con
cada persona.
Cuando alguien está en tu vida por una razón, por lo general es para satisfacer
una necesidad que tú mismo has expresado. Ellos han venido a ayudarte a través
de una dificultad, para ofrecerte orientación y apoyo, para ayudarte física,
emocional o espiritualmente. Pueden parecer como un regalo del cielo, y lo son.
Ellos están ahí por la razón que necesitas.
Luego, sin ninguna maldad de su parte o en un momento inoportuno, esta persona
va a decir o hacer algo para llevar la relación a su fin. A veces mueren. A veces se alejan. A veces actúan y te llevan a tomar una
posición. Lo que debemos entender es que nuestra necesidad o deseo se ha
cumplido, su trabajo ha terminado. La oración que enviaste al Universo ha sido
respondida y ahora es el momento de seguir adelante.
Algunas personas llegan a tu vida por una temporada, ya que ha llegado su turno
de compartir, crecer o aprender. Te traen una experiencia de paz o te hacen
reír. Pudieran enseñarte algo que nunca has hecho. Por lo general te dan una
cantidad increíble de alegría. Créelo. Es real. Pero sólo por una
temporada...
Las relaciones de por vida te enseñan lecciones de vida; cosas sobre las que
debes construir con el fin de tener una base emocional sólida. Tu tarea es aceptar la lección, amar a la persona y poner en práctica lo que
has aprendido a usar en todas las demás relaciones y áreas de tu vida. Se dice
que el amor es ciego... ¡pero la amistad es clarividente!
Gregg Prescott, MS.
Fuente: Biblioteca Pléyades Newsletter.